2018(e)ko irailaren 7(a), ostirala

Por fin me he aclarado!

Como decía en el título de este post, por fin me he aclarado con la creación del blog. El problema que tenia era una auténtica tontería pero ya sabéis que soy bastante zoquete con las nuevas tecnologías.
¡Al ataque!
Hoy ha amanecido lloviendo en Georgetown. Mi objetivo para el día de hoy era visitar el templo budista Tek Lok Si, el templo budista más grande del sudeste asiático. También llamado el templo de la felicidad suprema. Y así me he sentido yo cuando lo he visitado, feliz. Feliz de la armonía y paz que se respiraba en el lugar. He pagado 2 Ringgit para subir a la pagoda. Las vistas de la ciudad desde este lugar eran impresionantes. He conocido a dos parejas de catalanes con los que he compartido mis primeras impresiones sobre el país. Hemos coincidido en la riqueza cultural que existe y en el respeto que hay entre las diferentes poblaciones: china, India y malaya.
Después de visitar la primera pagoda, me he despedido de los catalanes (ellos se dirigían al snake temple) y yo he pagado 6 Ringgit más para subir en un ascensor a una segunda pagoda en la que estaba la estatua de bronze de Kua Yin, el dios de la caridad. Estatua imponente de 36.5 metros.
Cuando me hallaba como chiquilla con zapatos nuevos sacando fotos como una loca, me he resbalado en un charco y me he dado un auténtico baño. Un grupo de turistas ha presenciado mi caída en directo. Me he reído de mi misma y me he levantado bajo la media sonrisa del grupo (todo el mundo se estaba aguantando para no descojonarse). Mientras, el guía del grupo, les iba diciendo que tuvieran cuidado, que el terreno estaba resbaladizo. ¡Qué gracioso! Así es que con el vestido mojado he decidido que ya era hora de bajar. Como el hambre también apretaba, he pensado que seria una buena idea comer antes de coger el bus de vuelta. He sido muy afortunada ya que he encontrado un self service donde he hecho una mezcla de todos los platos vegetarianos que tenían.
 La comida me ha salido por 7 Ringgit,  menos de 2 euros. He felicitado a la cocinera porque todo estaba delicioso.
Después de 40 minutos o más de espera (al final ya he perdido la cuenta), he cogido el bus que me llevaría de vuelta al hostel. Aquí, he recogido mi mochila y me he movido para la terminal de ferrys con la intención de ir a Butterworth. Me apetecia hacer un poco de coachsurfing y mi anfitrión vive aquí. Mañana os cuento la experiencia haciendo coachsurfing.
Parece que esto va a ir por fases. Ahora no puedo subir las fotos desde el teléfono. Un poco de paciencia...
















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